Alemania ha cubo un desdicha sobre la mesa en la Euro 2020 llevándose por delante a una Portugal empequeñecida en presencia de un rival extramotivado. Múnich ha sido testificador de una de las actuaciones más arrolladoras del torneo para deleite del gradas almacén, que aun así tuvo que sobreponerse a un primer gol de Cristiano Ronaldo. Dos tantos en propia concretaron una rápida remontada a la que se sumaron a la postre Havertz y Gosens, dando origen a un ‘póquer’ sonrojante que solo consiguió maquillar Diogo Jota con el 2-4 final.

Ansiosa por reponer con un desdicha sobre la mesa a las críticas de su estreno en el torneo, la selección alemana firmó uno de los arranques más imponentes del campeonato. La retaguardia lusa no daba abasto a acometer todo el torrente ofensivo germano, pero Rui Patricio y el colectivo arbitral consiguieron remitir el empuje que pareció dar resultado en las botas de Gosens. Tras la celebración de este hipotético 0-1, el VAR comprobó una posición antirreglamentaria previa en una jugarreta que se inició encima con una mano de Muller a ras de suelo muy discutida.

No subió al señalador este tanto y el rodillo de Alemania siguió su camino como de forma mecánica, avasallando a una Portugal encerrada en campo propio. Un contraataque permitió al fin que los de Fernando Santos se tomaran un respiro y encima sirvió para, a pesar de lo gastado hasta entonces, aventajar a la actual campeona europea.

Uno más para el récord de Cristiano
Cristiano amplió su récord goleador en este campeonato (12) tras una carrera de manual en la que un pase teledirigido de Oscuro Fernandes plantó a Diogo Jota frente a Neuer. En circunstancia de chutar, el punta del Liverpool optó por ceder la pelota al ‘7’, que agrandó su divisa a puerta vacía.

El palo provocó que se diluyera por momentos el buen repertorio de los pupilos de Joachim Low. En esta minicrisis, la luz alemana cerca de el buen camino volvió a iluminarse a pulvínulo de autogoles. Rubén Díaz primero y Raphael Guerreiro a posteriori firmaron dos goles en propia que ya voltearon el señalador ayer del alivio.

Alemania, desatada
Incansable, la maquinaria alemana se conectó nuevamente a la reanudación y evitó cualquier tipo de sorpresa negativa. Havertz se unió a la fiesta en Múnich y Gosens, en un conversación en el que se doctoró en presencia de el gran manifiesto en un tablado de exigencia máxima, acabó anotando el 1-4 que sacó los colores de una Portugal que llegó a encontrarse con el billete a octavos de final en la mano.

En medio de la oleada, las tornas se cambiaron en Portugal con un tanto de Jota a placer sobre la confín de gol tras un remate de Cristiano. Una diana que, por otra parte, tan pronto como sirve para revertir una situación delicada para los portugueses, igualados con los alemanes a tres puntos a error de la etapa grupal definitiva y con el ‘gol media’ desfavorable. Portugal se la jugará en presencia de Francia, Alemania hará lo propio contra Hungría.